Hoy salgo de cuentas, me he despertado a las 5:55 de la madrugada y ya no puedo pegar ojo, he cometido el error de entrar en Youtube y empezar a ver un vídeo de parto (no he llegado ni al min 2), he cerrado el ordenador mirando al vacío y pensando, pobrecita habrá tenido un mal parto y será un caso entre 100.000, me lo he repetido unas 10 veces para ver si me quedaba claro.
Posteriormente he empezado a pensar en el embarazo y en lo agradable que ha sido en general la gente conmigo, desde conocidos a desconocidos, los conocidos por lo cariñosos que han sido y la seguridad que me han brindado en el embarazo, con piropos y ánimos y los desconocidos que me han dejado pasar por la calle, me han regalado una mirada con un destello en la pupila al verme embarazada con una mezcla entre respeto y protección, la gente que me ha cedido el asiento en muchos sitios, camareros, dependientes, conductores que me han regalado algún gesto agradable simplemente por estar embarazada... y los niños casi bebés que me han mirado de una manera especial, esto ha sido lo que más me ha sorprendido del embarazo...
Después me he puesto a pensar en el parto y los días posteriores y lo que tengo claro que no quiero que suceda, durante el embarazo he tenido que escuchar ciertas cosas que aun no se de dónde saqué la fuerza para no escupir en la cara en ese momento la contestación que se merecían las personas con comentarios desafortunados:
Soy una de esas madres primerizas que nunca habían pensado en el embarazo ni prestado mucha atención al tema (a pesar de haber tenido claro que quería ser madre desde siempre), pero parece ser que hay unas normas no escritas que yo no sabía pero que si saben las personas que tienen un máster en la maternidad o paternidad (no está reglado pero da lo mismo estas personas ya se han puesto el birrete y son unos profesionales, si, estoy siendo irónica...)